Este viernes, la Federación Nacional de Trabajadores de Cadenas de Farmacias de Chile (Fenatrafar) acusó procedimientos y prácticas indebidas por parte de las cadenas Salcobrand, Cruz Verde y Ahumada contra sus trabajadores, en medio de la pandemia por el covid-19.
En el caso de la cadena Salcobrand, el presidente del sindicato N° 2, Mauricio Acevedo, advirtió irregularidades respecto a «modificaciones unilaterales» de contratos, existiendo amenazas de despidos en caso de que los trabajadores no acepten las condiciones, entre las que destacan cambios de jornadas y lugares de trabajo, modificación en la estructura de remuneraciones, suma de labores no pactadas y la eliminación de asistentes de sala, teniendo, incluso, que realizar las labores de limpieza.
“Los nuevos contratos abusan de la multifuncionalidad de los auxiliares de farmacias, ya que se les obliga a realizar tareas que no guardan relación con la venta de productos farmacéuticos, sino que ahora se les exige efectuar hasta la limpieza y desinfección de los locales, cosa que, a su juicio, por seguridad sanitaría debiera estar a cargo de una empresa externa o personal especialmente destinado a esas labores”, explicaron en un comunicado.
Mientras que en las cadenas Cruz Verde y Ahumada denunciaron que los trabajadores de alto riesgo o quienes viven con personas de tales características, han debido mantenerse alejados de su trabajo por riesgos de contagio, pero reciben “remuneraciones variables muy bajas, impuestas únicamente a criterio de los empleadores”.
En Salcobrand y Cruz Verde, en tanto, comentaron que existe presión hacia los funcionarios para conseguir metas para que clientes paguen con la tarjeta de crédito de la farmacia, incentivar a realizar avances en efectivo desde las mismas o vender productos de la marca propia de la empresa.
Los trabajadores revelaron que a siete meses del inicio de la pandemia por el coronavirus, aún no se han implementado protocolos claros de atención ni procedimientos para encontrar contactos estrechos.
«A estas alturas, muchos hemos tenido que costear nuestros propios elementos de seguridad personal, porque hay farmacias que no entregan los suficientes o son de pésima calidad”, sostuvo Acevedo.
“Creemos que tanto la Dirección del Trabajo y los ministerios de Salud y Trabajo, deben pronunciarse respecto a estos abusos. Entendemos que en tiempos de crisis todos debemos flexibilizar nuestras posiciones, pero ello no puede hacerse bajo amedrentamiento ni a costa de los derechos de los trabajadores”, complementó el trabajador.
Por su parte, el presidente del sindicato Nº1 de Farmacias Ahumada agregó que “algunos de nuestros trabajadores son obligados a ejecutar funciones propias de guardias de seguridad, deben hacer el ingreso de los clientes y acompañarlos durante todo el proceso de compra; nosotros no estamos preparados para eso y nos distrae de nuestra real labor, que es asesorar bien a los clientes, que en muchos casos son pacientes”.
Mientras que la presidenta del Sindicato Nº 1de Cruz Verde, Susana González, recomendó volver a los turnos que se implementaron al inicio de la pandemia, cuando existía una rotación de turno.
“Sería mucho más seguro trabajar por turnos de cuatro por cuatro, como se hacía al comienzo de la pandemia, y no exponer a todo el personal con asistencia completa, porque los locales no cuentan con espacio suficiente para hacer distanciamiento y se sobrepasa con creces el aforo permitido para evitar contagios”, reflexionó González.