Ad portas de que el proyecto del salario mínimo sea votado por la sala de la Cámara de Diputadas y Diputados, la Comisión de Hacienda escuchó esta tarde al ministro del ramo, Ignacio Briones, y a la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores, Bárbara Figueroa.
En la ocasión, el ministro de Hacienda se mantuvo firme en la postura del Gobierno respecto de establecer un alza de solo un 0,4%, por lo que se pasaría de un sueldo mínimo de $320.500 a $322.000.
Sin embargo, el secretario de Estado se abrió a la posibilidad de legislar solo por seis meses este reajuste, para volver a conversar en marzo. “Me hace mucho sentido evaluar, darnos una estación intermedia para evaluar la situación económica del empleo en marzo, creo que es una ruta factible. Estoy muy abierto en la línea de conversar, tenemos que cerrar rápido este tema”, sostuvo el ministro, a propósito de una moción de la CUT.
“Como era obvio, en comisión de Hacienda, el ministro Briones insiste en reajuste cero al salario mínimo. Mañana vamos con todo a rechazar en sala. Los trabajadores y trabajadoras merecen un reajuste digno”, señaló en Twitter el presidente de la comisión, el diputado Daniel Núñez.
Si bien la iniciativa fue rechazada en su idea de legislar la semana pasada por la Comisión de Trabajo, por considerar insuficiente el monto, el texto fue igualmente derivado a su par de Hacienda por acuerdo de los comités parlamentarios, dado el carácter de discusión inmediata con que cuenta el mensaje del Ejecutivo, la cual tomó conocimiento de la incidencia presupuestaria de la norma.
En tanto, Bárbara Figueroa llamó a buscar la posibilidad de lograr un incremento mayor, ya que para los trabajadores más carenciados su nivel de ingresos no solo se ve afectado por el IPC, sino que “la canasta básica de alimentos, que ha subido en un porcentaje mucho mayor, debe ser clave a la hora de analizar un reajuste salarial”.
El proyecto en discusión, en primer trámite constitucional, se encuentra en el segundo lugar de la tabla de sala de este martes.