El Senado aprobó en particular y despachó a tercer trámite el proyecto de ley de Inmigración. En la oportunidad, la Cámara Alta rechazó la indicación que permitía a los ciudadanos extranjeros regularizar su situación migratoria hasta 90 días después de publicada la ley.
El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, valoró la decisión del Senado y especialmente que rechazara tal enmienda.
“Destaco particularmente que hoy hemos avanzado en políticas públicas correctas. Ayer se descartó una indicación que permitía acceder a residir en el país recién declarando esa voluntad en la frontera. Primó la responsabilidad y el hecho de pedirles a aquellas personas que quieran venir a buscar oportunidades a Chile que lo declaren así antes”, apuntó.
“Y en segundo lugar -prosiguió-, hoy pudimos convencer a los senadores de la inconveniencia de una política pública que implicaba establecer un proceso de regularización para todas aquellas personas que ingresaran a nuestro país hasta 90 días después de publicada la ley. Esa indicación finalmente no tuvo ningún voto del Senado”.
Galli añadió que “este proyecto de ley se inicia hace ya ocho años, en 2012, cuando en el primer gobierno del Presidente Sebastián Piñera ingresamos la reforma de la legislación migratoria. Nuestra ley migratoria actual data de 1975, claramente, nuestra regulación no se hacía cargo del fenómeno de la migración en una época de globalización, de grandes movimientos migratorios, por distintas razones”.
“Por eso -aseveró- creemos tan relevante que el Senado haya dado su aprobación al proyecto de ley que crea una nueva institucionalidad migratoria, el Servicio Nacional de Extranjería y Migración, y establece una regulación migratoria moderna, que hace frente al fenómeno de este siglo y nos permite crear una política al respecto para lograr el objetivo de una migración ordenada, segura y regular.