El Juzgado de Garantía de Coyhaique dejó en prisión preventiva a Cristián Díaz Vargas, imputado por el Ministerio Público como autor de los delitos consumados de violación con femicidio, hurto, violación de morada y poner en peligro la salud pública en tiempo de epidemia, los que habría perpetrado el jueves recién pasado en esa ciudad.
En la audiencia de formalización, la magistrada Cecilia Urbina Pinto ordenó el ingreso de Díaz Vargas al Centro de Cumplimiento Penitenciario de Coyhaique, por considerar que la libertad del imputado constituye un peligro para la seguridad de la sociedad. Además, fijó en 180 días el plazo de investigación.
Según la fiscalía, en la madrugada del jueves pasado, Díaz Vargas -de 41 años- se encontraba en un domicilio ubicado en el pasaje la Frontera de Coyhaique compartiendo con Julia Mansilla Vargas, de 21 años de edad. En dicho contexto, el imputado agredió a la víctima con golpes de puño en el rostro, cabeza y pecho con el objetivo de vencer su resistencia. Además, sujetó del cuello a la joven para inmovilizarla y violarla.
Asimismo, procedió a atacarla con un cuchillo, infiriéndole decenas de heridas cortopunzantes en diversas partes del cuerpo, provocando su muerte. Según la fiscalía, el sujeto infligió 72 estocadas a la mujer. Antes de huir sustrajo el teléfono celular de la víctima.
Posteriormente, en horas de la mañana, el acusado concurrió hasta el domicilio del padre de la víctima, ingresando por medio de la fuerza, rompiendo un vidrio de la puerta trasera, con el fin de recuperar un polerón de su propiedad.
En tanto, cerca de las 15.40 horas, el imputado fue sorprendido por funcionarios de Carabineros transitando por la vía pública por la Ruta 7 de la ciudad, sin portar permiso, autorización o salvoconducto para circular en medio de la cuarentena decretada en la comuna debido a la pandemia de covid-19.
Según describió el fiscal Luis Contreras, “los antecedentes vertidos en la audiencia denotan una agresividad de naturaleza sexual cometida por el imputado en perjuicio de la víctima, donde se destacan la numerosa cantidad de heridas en diversos lugares del cuerpo”.
El detenido, en su declaración ante la policía, reconoce las agresiones físicas y el uso de un cuchillo, pero no reconoce la agresión sexual contra la joven.