Por Sebastian Arcos
Un 24 de noviembre de 1991, fallecía en su mansión de Londres la voz de Queen, Freddie Mercury; quien horas antes de su deceso, hizo público que era portador de VIH/SIDA. Farrokh Bulsara, su verdadero nombre, fue capaz de cautivar al mundo con su forma de usar el escenario, su paso por Queen lo llevó a convertirse en leyenda.
Mercury inició su camino musical en Wreckage, mientras estudiaba en Middlesex, allí un compañero de diseño lo presentó con Roger Taylor y Brian May, quienes formaban parte de Smile. Una vez con Freddie dentro del equipo, Smile se convirtió en Queen y con la llegada de John Deacon, la banda se convirtió en una de las más potentes de Inglaterra, para luego hacer vibrar al mundo durante 20 años unidos.
«Bohemian Rhapsody», «We are the Champions» y «Love of my life» son parte del legado creativo de Mercury, siendo esta última una declaración de amor incondicional a Mary Austin, quien fuera su amiga, cómplice y amante. La mujer acompañó a Freddie en sus últimos días de vida, el cantante a modo de gratitud, convirtió a Austin en la heredera de su fortuna.
Freddie Mercury pudo presentarse en Chile en 1985, pues Queen estaba de gira con The Works Tour y nuestro país era una de las paradas que haría la banda británica. Lamentablemente para los fanáticos nacionales, el show no pudo llevarse a cabo debido a que su visita promovía la homosexualidad, eso según integrantes de la Junta Militar, quienes habían visto el video de «I want to break free».
