La sala de la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó casi por unanimidad, 148 votos a favor y una abstención, el proyecto de ley que tipifica como delito el desvío, contaminación, usurpación u ocupación ilegal y cualquier modo ilegítimo de afectación de las aguas.

La iniciativa plantea establecer penas de cárcel efectivas y multas millonarias a quienes usurpen, contaminen o afecten el agua de algún modo. Como tuvo indicaciones, ahora volverá a ser revisada en la Comisión de Hídricos.

Además, el proyecto menciona que “el recurso hídrico es la condición necesaria para la vida, por tanto, cualquier afectación es un atentado directo contra la vida de la población; en especial, respecto de aquellos que se encuentran en zonas donde la sequía y los problemas de la institucionalidad han generado una afectación directa a su derecho al acceso al agua”.