Pasadas las 9 de la mañana, llegó hasta la denominada “La Moneda chica”, el presidente electo Gabriel Boric, para continuar su intensa agenda de reuniones de cara al cambio de mando del 11 de marzo.
Sin embargo, como se ha hecho costumbre, un grupo de personas esperó al mandatario electo en las afueras del edificio ubicado en la intersección de Obispo Salas y Condell, en la comuna de Providencia.
Se trata de personas particulares y organizaciones, quienes llegan para entregar cartas y peticiones, además de regalos e incluso sólo a conocer a Boric, quien generalmente se da el tiempo de saludar.
Así ocurrió por ejemplo esta mañana, donde conversó con Amaro, de 8 años, que llegó junto a su papá hasta “La Moneda chica”.
“Gracias por estar acá y por venir a vernos”, le dijo Boric.
“Un placer de poder conocerlo, y le deseo los mayores de los éxitos en estos cuatro años que vienen”, le respondió por su parte el papá del menor.
“Vamos a dar lo mejor de nosotros, van a haber momentos difíciles, se lo digo a todo el mundo”, replicó el mandatario electo.
Boric: “Me da un poco de pudor”
Así son generalmente los diálogos que suele sostener Boric con quienes le esperan a la salida del edificio, en una situación que el mismo reconoce que le provoca pudor.
“Me da un poco de pudor la verdad, porque no soy un rockstar, estamos haciendo política”, señaló el mandatario electo, según publica La Tercera.
“Han habido cosas hermosas, ayer unas fotos preciosas, libros. Ahora tengo un desorden en mi oficina”, reconoció.
Recordemos que según la última encuesta Cadem-Plaza Pública, un 46% (-9pts) cree que a Chile le irá muy bien/bien con el nuevo gobierno de Gabriel Boric.
Mientras que el último sondeo realizado por Criteria, correspondiente a diciembre de 2021, reveló que el presidente electo cuenta con un 43% de evaluación buena o muy buena.