El ministro de Hacienda, Mario Marcel, valoró el anuncio del Gobierno de un proyecto de «retiro acotado» desde los fondos previsionales destinado a cuatro prioridades de seguridad social, asegurando que, con ello, «sería injustificado un quinto 10%».
Según detalló la autoridad, la presentación de la idea permite señalar que «sería innecesario, riesgoso e injustificado un quinto retiro» tal como fue aprobado en tres oportunidades anteriormente.
Específicamente, la idea busca que el retiro no sea para libre disposición como los tres anteriores, quedando solo para ser utilizado como pagos en estos cuatro casos:
- Como mecanismo para saldar pensiones alimenticias
- Deudas arrastradas por servicios básicos
- Ahorros del subsidio DS1 y DS59 de las viviendas sociales
- Pagar deudas con créditos hipotecarios
Asimismo, dicha normativa será ingresada a la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja con discusión inmediata durante este martes.
Con este contexto, se prevé que en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputadas y Diputados no prospere el quinto retiro, votación que se realizará este martes.
Gael Yeomans, diputada de Convergencia Social, destacó que la idea del Ejecutivo busca «involucrar al Gobierno y las bancadas oficialistas para responder a las necesidades de vivienda, deudas y pensiones alimenticias».
«No podemos darle la espalda al Presidente Boric con medidas que podrían afectar más en la inflación», aseveró.
Catalina Pérez, diputada de Revolución Democrática, afirmó que «es un retiro especial, el cual no compromete la inflación que tan acogotada tiene a las familias».
Por su parte, el diputado del Partido Liberal, Alexis Sepúlveda, criticó al ministro secretario de la Presidencia, Giorgio Jackson, acusándolo de no incluirlos en conversaciones para llegar a un acuerdo.
«Pedimos respeto al Partido Radical. Somos cuatro votos, nos sentimos pasados a llevar como ha sido el relato de estas últimas semanas», reclamó.
Finalmente, el representante de la UDI, Jorge Alessandri, cuestionó el liderazgo político de Marcel, sentenciando que «el Partido Comunista le dobló la mano, esto pone en duda su peso y credibilidad».