Este martes, desde el INDH precisaron que «los derechos de las personas enfrentan en el mundo contemporáneo una serie de amenazas», y que su protección «requiere de condiciones de seguridad, que sólo se pueden consolidar en democracia».
Ante el aumento de las cifras de apoyo y justificación al golpe de Estado de 1973 informadas por la encuesta Cerc-Mori, que indican que un 36% de las personas afirman que las Fuerzas Armadas “tenían razón” para dar el golpe, desde el Instituto Nacional de Derechos Humanos aseguraron estar preocupados y plantearon que el resultado se explica porque “podemos estar fallando en transmitir el mensaje adecuado”.
Consuelo Contreras, directora del INDH, aseguró que “hemos tomado conocimiento de los resultados del Barómetro de la Política CERC – MORI 1987 – 2023, y agrega que “contemplamos con preocupación esta respuesta, más aún porque este año se cumplen 50 años de la interrupción de la democracia”.
“Para quienes nacieron después de 1990, nuestro actual sistema republicano puede parecerles uno de tantos con la capacidad de mejorar los índices de bienestar o, peor aún, se les puede presentar como un obstáculo para sus anhelos”, expresó Consuelo Contreras.
La directora del INDH profundizó en el análisis y expresó que la cifra “debe ser tomada por nosotros como una lección. Nos hace presente que podemos estar fallando en transmitir el mensaje adecuado a quienes residen en el país, muy en especial a aquellos que no vivieron cotidianamente la violencia y las vulneraciones que se convirtieron en elementos habituales de la dictadura”.
Respecto de la necesidad de la defensa de la democracia, Consuelo Contreras aseguro que dicho sistema de gobierno es “uno de los pilares fundamentales del Estado de Derecho y no existe razón que valide su interrupción. La independencia de los poderes del Estado y el respeto de los derechos humanos encarnan sus pilares fundamentales. No hay otro sistema de gobierno en que las garantías de todas las personas se encuentren mejor resguardadas”.
Por último, desde el INDH precisaron que “los derechos de las personas enfrentan en el mundo contemporáneo una serie de amenazas”, y que su protección “requiere de condiciones de seguridad, que sólo se pueden consolidar en democracia”.
“No hay razón que justifique apartarse de un camino en el que ya hemos alcanzado logros tan relevantes para el bienestar de todos quienes viven en Chile”, cierra el comunicado de Consuelo Contreras.