Una basura le quitó la vida a mi hermanita, ella era mi bebé (…) Nos quedamos con un dolor gigante porque esta persona era valiosa en todos los aspectos”.

Las palabras corresponden a Daniela, hermana de la subinspectora Valeria Vivanco, asesinada el domingo en el límite de las comunas de La Pintana y La Granja.

La detective fue baleada en el tórax cuando se aprestaba a controlar un vehículo en medio de una investigación por homicidio.

La misa fúnebre por el descanso de su alma se realizó en dependencias de la Escuela de Investigaciones Policiales en Estación Central y  contó con la participación del Presidente Sebastián Piñera.

El Mandatario manifestó que la mujer mártir “dejó una profunda huella en este mundo” y que “todos la querían, su familia, sus compañeros de la PDI”.

“Valeria entregó su vida cumpliendo con su deber para proteger la vida de los demás. No hay nada más noble que lo que hizo Valeria (…) Cuesta comprender por qué Dios a veces llama a las mejores en forma tan temprana“, indicó el Jefe de Estado.

“Valeria interpreta el espíritu de la PDI, de Carabineros, que todos los días arriesgan sus vidas para proteger las nuestras” y que “cuesta comprender cómo puede haber tanta maldad”, precisó Piñera.