Desde la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno (SAGO) respondieron las acusaciones en contra de los productores de papa por el alza de precios, asegurando que el Gobierno debe visibilizar los problemas que se arrastran hace meses en este rubro.
El gremio advirtió que el producto continuaría presentando escasez hasta por lo menos diciembre de este año.
Lo anterior, apuntando a las opiniones vertidas por la ciudadanía y autoridades de Gobierno en torno al alza de la papa, desde presuntas especulaciones por almacenamiento del tubérculo, hasta acusaciones de colusión.
A través de un comunicado, en conjunto con el Consorcio de la Papa, explican que en el país existen cerca de 20 mil productores, quienes “han registrado un historial de arrastre de varios años de costos con tendencia al alza, principalmente fertilizantes y otros insumos que han llegado a un incremento de un 300%, lo que se tradujo en una reducción cercana al 20% en la siembra del tubérculo disponible para cosecha en 2023”.
Mediante un gráfico (con base a sacos de 25 kilos), sostienen que el alza de precios de la papa al consumidor final se viene evidenciando desde hace varios meses, no siendo una consecuencia súbita y exclusiva de la situación de las últimas inundaciones ocurridas en la zona central en agosto.
Ello, según esgrimió el presidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno, Sergio Willer, se transformó en un desincentivo, que podría repercutir en otras producciones agrícolas.
“Los agricultores y ganaderos de Chile somos tomadores de precio. Nosotros no fijamos el precio. Lo que se produjo este año fue alrededor de un 20-25% menos de producción, dado los altos costos de fertilizante del año anterior”, aseveró.
“Que no extrañe que esto pase también en otros rubros. Nosotros, todo lo que se debe, en cuanto a agricultura y ganadería, es un desincentivo a la producción, así que no es de extrañar que precios en otros rubros alimenticios por falta de rentabilidad”, advirtió.
n el texto, señalan que “la gran dispersión territorial de los miles de productores de papas a lo largo del país hacen imposible que exista posibilidad de acordar precios para aumentos de valor a consumidor”, por lo que descartan un escenario posible de colusión.
Además, reiteran que la disminución en la producción de este año implica que exista una oferta menor disponible, y que, “en el caso de la zona centro-sur, muchos productores están entregando sus últimos remanentes de papas disponibles, a precios acordados previos al alza”, asegurando que “una fracción importante comercializó toda su producción en mayo”.
Asimismo, afirman que el alza de precios de la papa a consumidor final se viene evidenciando desde hace varios meses, y se estima que la escasez de la papa se siga observando “muy probablemente hasta el mes de diciembre”.
El presidente de la Sociedad Agrícola dijo que el Estado debe cumplir un rol fundamental con políticas y certezas claras en promover que en el campo y la agricultura exista una mayor producción.
“Creemos firmemente que el Estado de Chile debiese proponer -y el Ministerio de Agricultura en este caso- a hacer que el campo y los agricultores produzcan más, y para eso hacen falta más políticas claras. Hace falta certeza de parte no sólo de este Gobierno, sino que de los anteriores también”, recalcó.
A lo anterior, desde SAGO y el Consorcio de la Papa, dicen que “es indispensable conocer profundamente las cadenas de producción, ya que existen multiplicidades de factores que están implicados en las alzas de precio a pagar por parte de quien finalmente adquiere dicho productor para llevar a la mesa”.
En cuanto al próximo año, explican que la baja en la producción actual de papa derivó en una menor disponibilidad de semillas en la Macrozona Sur, por lo que se aventura que la producción “seguirá estando por debajo de los niveles de producción de años anteriores”.
Finalmente, el gremio de agricultores aclaró que “existe una preocupación por el sector productor de alimentos, ya que 2023 ha sido un año complejo para la mayoría de los rubros agropecuarios, siendo una oportunidad para incrementar la valorización que tiene el rol agrícola y ganadero”.
